La flexibilidad de la fibra de vidrio aporta gran resistencia a los platos de ducha, protegiéndolos de posibles golpes o deformaciones irreparables, a diferencia de los de resina o cerámica que tienden a fracturarse fácilmente por naturaleza.
Fabricamos nuestros platos en cualquiera de los colores existentes en la carta RAL, ofreciéndote así la posibilidad de contar con un producto único que encaja con cualquier espacio y decoración que puedas imaginar.
La fibra de vidrio reduce al máximo el peso del plato de ducha sin perder sus prestaciones. Nuestros platos, de entre 8kg y 13kg, son los más ligeros del mercado y los más fáciles de transportar, almacenar y montar.
Nuestros materiales permiten los cortes necesarios para adaptar el plato al ángulo o la forma de tu baño. Además, su textura rugosa en la parte posterior favorece la adherencia a los productos de construcción utilizados en su instalación.